GRÁMATICA HEBREA: ELOHIM (¿PLURALIDAD?) Y EJAD (¿UNIDAD COMPUESTA?)
GRÁMATICA
HEBREA – LIMUD HATORA
ELOQIM
¿Plural o Singular?
שְׁמַע יִשְׂרָאֵל יהוה אֱלֹהֵינוּ יהוה אֶחָד
Shemá Israel,
Adonay Eloheinu, Adonay Ejad
Escucha,
oh Israel, el Eterno [que] es nuestro Di-s, el Eterno es Uno.
Esta es la
declaración de fidelidad que todo Judío debe proclamar, que Di-s es Uno. Sin
embargo, los cristianos en general argumentan (por ignorancia o por mala
voluntad) que esta declaración contiene indicios de la trinidad, triunidad y
unicismo, y se atreven a hacerlo incluso malinterpretando el texto hebreo. Las
dos palabras sobre las cuales los engañadores apoyan su falsa interpretación
son « אֱלהִים Eloqim» y «
אֶחָד Ejad», aduciendo que la primera es plural y
que la segunda implica pluralidad – nada más lejos de la verdad. En este breve
estudio examinaremos ambas correctamente según la lengua hebrea, y quien quiera
puede cotejar lo que aquí expondremos, pero asegúrese de que sea con eruditos
de la lengua hebrea y no con aprendices de teología cristiana, que nada saben
de lengua y acomodan todas las cosas para favorecer sus ideas religiosas,
atreviéndose incluso a mentir descaradamente sobre una lengua que desconocen.
En la primera parte veremos la palabra «Eloqim»; en la segunda parte, la
palabra «Ejád».
ELOQIM אֱלהִים
Es sabido que desde el punto de vista morfológico esta palabra correspondería a
un plural masculino, según la regla general de la lengua hebrea que establece
que los plurales masculinos terminan en “-im” y los femeninos en “-ot”. Sin
embargo, como en todas las lenguas, las reglas generales no son absolutas sino
que hay matices y excepciones. Efectivamente, en hebreo existen palabras
masculinas con forma femenina y viceversa, y palabras singulares con forma
plural; así como hay palabras que son masculinas en el singular y tienen un
plural femenino, o palabras que son femeninas en el singular y tienen un plural
masculino. A su vez, hay sustantivos que llevan adjetivos de género opuesto, y
otros que no siempre concuerdan con el verbo en género o número. Y en
definitiva, lo que determina si una palabra es singular o plural no es su
morfología sino el verbo que la acompaña. Antes de pasar al estudio de la
palabra « אֱלהִים Eloqim» veamos algunos ejemplos
de lo anteriormente dicho:
Como lo que nos interesa en este caso son las palabras singulares con forma
plural, dejaremos los otros ejemplos relativos a género para otra oportunidad
en que sea relevante presentarlos.
Algunas
palabras singulares con forma plural que encontramos en las Escrituras:
• panim – cara, rostro
• ajot – hermana
• rajamim – misericordia (morfológicamente sería el plural de “rejem”, útero,
pero semánticamente es una palabra distinta)
• kelulot – nupcial, estado de la novia durante la boda
• avarim – lugar del otro lado (de un río)
• marerot – amargura
• Yerushalayim – Jerusalem, tiene la particularidad de ser una palabra femenina
singular con forma de plural masculino (hay un significado en esto, pero es
objeto de otro estudio).
Estos pocos ejemplos (hay muchos más) nos demuestran que las reglas
morfológicas en hebreo no son estrictas y no se puede establecer el género y
número de una palabra aisladamente sino sólo cuando la consideramos en su contexto.
Hay palabras que también pueden tener la misma forma en singular y en plural,
pero cambiando significado. Por ejemplo, «Mitzrayim», que puede significar
“Egipto” o “egipcios”. ¿Cómo sabemos cómo determinarlo? Según el verbo que la
acompañe: si es singular, se trata de Egipto, si es plural, se trata de los
egipcios. Lo mismo sucede con «אֱלהִים Eloqim»: la misma palabra se puede referir a
Di-s, o a los Malajim - Mensajeros, o a dioses paganos. Cuando se trata de Di-s,
el verbo siempre está en singular.
Consideremos entonces entre los usos de la forma plural en la lengua hebrea, el
caso de la palabra «אֱלהִים Eloqim». Uno de esos usos indica una cualidad,
como en el caso de los substantivos abstractos que en castellano terminan en
–dad, –tud, –eza, etc. (como en inglés -hood, -ness, -ship, -ty).
Concretamente, «אֱלהִים Eloqim» debería traducirse “Deidad” más bien
que Di-s. De otra manera, la misma palabra “אֱלהִים Eloqim” se usa para designar dioses ajenos no
sólo en plural sino también en singular:
1Reyes 11:4
יְהִ֗י לְעֵת֙ זִקְנַ֣ת
שְׁלֹמֹ֔ה נָשָׁיו֙ הִטּ֣וּ אֶת־לְבָב֔וֹ אַחֲרֵ֖י אֱלֹהִ֣ים אֲחֵרִ֑ים וְלֹא־הָיָ֨ה
לְבָב֚וֹ שָׁלֵם֙ עִם־יְהֹוָ֣ה אֱלֹהָ֔יו כִּלְבַ֖ב דָּוִ֥יד אָבִֽיו:
Y ya que
Salomón era viejo, sus mujeres inclinaron su corazón tras dioses [Eloqim]
ajenos; y su corazón no era perfecto con HASHEM su Eloqim, como el corazón de
su padre David.
1Reyes 11:5
וַיֵּ֣לֶךְ שְׁלֹמֹ֔ה
אַחֲרֵ֣י עַשְׁתֹּ֔רֶת אֱלֹהֵ֖י צִדֹנִ֑ים וְאַחֲרֵ֣י מִלְכֹּ֔ם שִׁקֻּ֖ץ עַמֹּנִֽים:
Porque
Salomón siguió a Astaroth, diosa [אֵלָה / אֱלֹהֵ֖י (mi) Eloqim] de
los Sidonios.
En este
ejemplo vemos que la misma palabra “Eloqim” se usa en plural para “dioses” y en
singular para una “diosa” femenina!
1Reyes 11:33
יַ֣עַן | אֲשֶׁ֣ר
עֲזָב֗וּנִי וַיִּֽשְׁתַּחֲווּ֘ לְעַשְׁתֹּרֶת֘ אֱלֹהֵ֣י צִֽדֹנִין֒ לִכְמוֹשׁ֙ אֱלֹהֵ֣י
מוֹאָ֔ב וּלְמִלְכֹּ֖ם אֱלֹהֵ֣י בְנֵֽי־עַמּ֑וֹן וְלֹֽא־הָלְכ֣וּ בִדְרָכַ֗י לַעֲשֹ֨וֹת
הַיָּשָׁ֧ר בְּעֵינַ֛י וְחֻקֹּתַ֥י וּמִשְׁפָּטַ֖י כְּדָוִ֥ד אָבִֽיו:
Por cuanto
me han dejado, y han adorado a Astharoth diosa [אֵלָה / אֱלֹהֵ֖י (mi) Eloqim] de
los Sidonios, y a Chêmos dios [אֱלֹהֵ֖י (mi) Eloqim] de
Moab, y a Moloch dios [אֱלֹהֵ֖י (mi) Eloqim] de los hijos de Ammón; y no han andado en mis
caminos, para hacer lo recto delante de mis ojos, y mis estatutos, y mis
derechos, como hizo David su padre.
Aquí se dan
nombres de ídolos paganos, los cuales NO eran trinos, ni duales ni plurales,
sino simples dioses singulares, tanto masculinos como femeninos, y sin embargo
a todos ellos se les llama, individualmente, «אֱלהִים Eloqim», con la misma palabra morfológicamente
plural con la que se designa al Di-s de Israel. Si debiéramos traducir al
castellano el término hebreo siempre con la misma palabra, sólo cabría “deidad”
Probemos:
1Reyes
11:33 Por cuanto me han dejado, y han adorado a Astharoth
deidad [Eloqim] de los Sidonios, y a Chêmos deidad [Eloqim] de Moab, y a Moloch
deidad [Eloqim] de los hijos de Ammón; y no han andado en mis caminos, para
hacer lo recto delante de mis ojos, y mis estatutos, y mis derechos, como hizo
David su padre.
Bien, hemos
podido traducir con la misma palabra los términos masculino y femenino
(dios/diosa) para poder corresponder más exactamente con el texto hebreo, que
designa a todos y a cada uno de ellos en singular como «אֱלהִים Eloqim» – pero para traducir el
otro texto que hemos citado anteriormente, debemos forzosamente acomodar la
traducción al número expresado por el verbo o adjetivo:
1Reyes 11:4 Y ya que Salomón era viejo, sus mujeres inclinaron su corazón tras
deidades [Eloqim] ajenas; y su corazón no era perfecto con HaShem su Eloqim,
como el corazón de su padre David.
11:5 Porque Salomón siguió a Astaroth, deidad [Eloqim] de los Sidonios.
Entonces,
¿Qué es lo que determina si «אֱלהִים Eloqim» es singular o plural? Indudablemente, el verbo
(o el adjetivo). En este punto hemos ya puesto en evidencia que si bien «אֱלהִים Eloqim» es morfológicamente
plural, no implica que se refiera a entidades plurales, porque tanto Astarot
como Kemosh como Moloj eran ídolos unipersonales, no trinos ni plurales en
ninguna manera, y por lo tanto llevan adjetivo y verbo en singular, exactamente
igual que «אֱלהִים Eloqim» cuando se refiere al Di-s de Israel. En todos
los casos, «אֱלהִים Eloqim» (referido al Único Di-s verdadero) lleva
adjetivos en singular, nunca en plural:
Eloqim tzadiq (אלהים צדיק) – Salmo 7:9;
Eloqim tov (אלהים טוב) – Salmo 73:1;
Eloqim haGadol (האלהים הגדול) – Nehemías 8:6; etc.
Además de esto, hay otro motivo por el cual el Eterno es
llamado Eloqim:
En las lenguas semíticas existe
lo que se llama “plural de
excelencia” (aunque lo nieguen los indoctos, es una forma gramatical común a
todas las lenguas semíticas desde el antiguo akkádico en adelante, y
transmitida incluso al árabe, como veremos más adelante). Este plural se usa
como superlativo, como máxima expresión de algo. Veamos algunos ejemplos:
En Isaías
40:14 la palabra traducida “inteligencia”, “entendimiento”, “prudencia”
es «ťbunot», forma plural de «ťbunah», lo
cual indica no una pluralidad sino una máxima dimensión.
En Isaías 27:11 la palabra traducida “entendimiento”, “discernimiento” es «binot»,
forma plural de «binah», y no indica plural sino que es una
forma poética.
Siendo «ťbunah» y «binah» conceptos
abstractos, no pueden tener plural.
En Daniel 9:23 la palabra traducida “muy amado”, “grandemente amado” es «jamudot»,
forma plural femenina de «jamúd», que significa “precioso”,
“querido”, “amado”, “deseable”, y aquí vemos esta expresión usada hacia un
hombre.
¿Era Daniel trino? Evidentemente, no.
En Isaías
33:15 la palabra traducida “justicia” es «tz’dakot», forma
plural de «tz’dakah», expresando una máxima dimensión de la
justicia, la cual no puede ser nunca plural pues es un concepto abstracto.
En
Proverbios 1:20 la palabra traducida “sabiduría” es «jajmot»,
forma plural de «jojmah», expresando una máxima dimensión de
la sabiduría, la cual tampoco puede ser nunca plural pues es un concepto
abstracto.
Un caso muy interesante es cómo todos los traductores, en todos los idiomas,
han traducido Mishlei - Proverbios 30:3: וְלֹֽא־לָמַ֥דְתִּי
חָכְמָ֑ה וְדַ֖עַת קְדשִׁ֣ים אֵדָֽע: “Yo
ni aprendí sabiduría, ni conozco la ciencia del Santo”. La palabra
traducida aquí “Santo” es « קְדשִׁ֣ים k’doshim», forma plural de «kadosh». ¿Por qué ningún erudito,
en ningún idioma tradujo esta palabra como “santos”, en plural, siendo que en
hebreo está en esa forma? Porque evidentemente, todos los expertos tienen
conocimiento del plural de excelencia existente en la lengua hebrea. Sólo los
indoctos niegan esta verdad indiscutible.
Como estos
hay muchos otros ejemplos, pero a modo ilustrativo estos pueden bastar. Queda
establecido claramente que «אֱלהִים Eloqim» , cuando se refiere a Di-s es siempre, en
todos los casos, singular y no implica en manera alguna que haya una pluralidad
en Él. Sin embargo, los obstinados presentan otra objeción, la cual pasamos a
exponer:
Génesis 1:26 Y dijo «אֱלהִים Eloqim»: Hagamos al hombre a nuestra imagen,
conforme a nuestra semejanza.
Génesis 3:22 Y dijo HaShem «אֱלהִים Eloqim»: ciertamente el
hombre ha llegado a ser como uno de nosotros, conocedor del bien y del mal.
Génesis 11:5-7 Y descendió HaShem para ver la ciudad y la torre que
edificaban los hijos de los hombres. Y dijo HaShem: He aquí el pueblo es uno, y
todos estos tienen un lenguaje: y han comenzado a obrar, y nada les retraerá
ahora de lo que han pensado hacer. Ahora pues, descendamos, y confundamos allí
sus lenguas, para que ninguno entienda el habla de su compañero.
Jeremías 30:5 Porque así ha dicho HaShem: Hemos oído voz de
temblor; de espanto, y no de paz.
Como vemos,
en estos cuatro pasajes, Di-s usa el plural en referencia a Sí mismo. En todos
estos casos, se trata del plural de excelencia (pluralis excellentiae) y del
modo cohortativo del verbo –en un buen libro de gramática del hebreo tanajico se pueden encontrar estos conceptos
ampliamente explicados, para quien desee profundizar–. En todos los casos, se
trata de Di-s hablando en primera persona, pero jamás se usa un verbo en plural
cuando las Escrituras se refieren a Él ni en segunda ni en tercera persona, y
solamente en estos cuatro pasajes citados arriba Él mismo usa el plural en
primera persona. Ahora pasaremos a explicar por qué.
Cuando se da una orden, gramaticalmente es necesario que intervengan dos
personas: quien da la orden y quien la recibe. Por este motivo, el modo
imperativo en hebreo sólo existe con una forma propia en segunda persona,
siendo la primera quien habla, y se dirige a la segunda. ¿Y qué sucede cuando
alguien se da una orden a sí mismo? Se usa el modo cohortativo, que sería algo
similar a un auto-imperativo. Este modo verbal, que existe sólo en primera
persona, se construye utilizando la primera persona del plural en tiempo
futuro, y es plural porque el imperativo exige que haya quien da la orden y
quien la recibe, entonces el “yo” se convierte en “nosotros”, porque “yo” le
doy la orden a “yo” de hacer algo.
En Génesis 1 Di-s da una serie de órdenes:
1:3 Y dijo «אֱלהִים Eloqim»: Sea la luz: y fue la luz. 1:6 Y
dijo «אֱלהִים Eloqim»: Haya expansión en
medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas.
1:9 Y dijo «אֱלהִים Eloqim»: Júntense las aguas que están
debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase la seca: 1:11 Y dijo
«אֱלהִים Eloqim»: Produzca la tierra
hierba verde, hierba que dé simiente; etc. 1:14 Y dijo «אֱלהִים Eloqim»: Sean lumbreras en la
expansión de los cielos para apartar el día y la noche: etc. 1:20 Y
dijo «אֱלהִים Eloqim»: Produzcan las aguas
reptil de ánima viviente, y aves que vuelen sobre la tierra, en la abierta
expansión de los cielos.
1:24 Y dijo «אֱלהִים Eloqim»: Produzca la tierra seres vivientes
según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie:
1:26 Y dijo «אֱלהִים Eloqim»: Hagamos al hombre a nuestra imagen,
conforme a nuestra semejanza.
Estas son
las ocho órdenes que da «אֱלהִים Eloqim» en la Creación. Notemos que en todas ellas, el
verbo es “dijo” «אֱלהִים Eloqim», y no “dijeron”. Este verbo es el que
determina el número del substantivo. En las primeras siete, Él da órdenes a las
cosas creadas, en la última, se da una orden a Sí mismo, y por este motivo usa
el modo cohortativo del verbo, que es morfológicamente un futuro plural. En
castellano también sabemos usar este tipo de forma verbal, si bien no existe
como modo, cuando decimos “vamos” a hacer tal cosa, y nos referimos en realidad
al “yo”.
En Génesis
11:7 es la última vez que encontramos esta misma forma verbal, cuando HaShem (y
no «אֱלהִים Eloqim») se da una orden a Sí
mismo: “descendamos y confundamos”, y es evidente que HaShem no es
un Nombre morfológicamente plural, sin embargo usa el modo cohortativo del
verbo porque es el que corresponde gramaticalmente, y no porque implique una
pluralidad del sujeto.
En Génesis 3:22 encontramos el plural de excelencia en el pronombre, y en y
Jeremías 30:5 en el verbo. Esta es una forma natural de todas las lenguas
semíticas, tal es así que en árabe, quien haya leído el corán quizás haya notado
que en todos los casos en que quien habla es Alá, habla de sí mismo diciendo
“nosotros”, y el verbo siempre en plural. Y a nadie le vendría en mente usar
este pobre argumento para demostrar que Alá es plural o que es una trinidad o
que haya algún indicio de pluralidad en él. Por lo tanto quien niega que exista
el plural de excelencia en hebreo carece de conocimiento. Pero veamos otros
casos en el Tanaj en los cuales el plural de excelencia es usado por hombres,
comunes mortales:
Daniel 2:26 Respondió el rey, y dijo a Daniel, al cual llamaban Beltsasar:
¿Podrás tú hacerme entender el sueño que vi, y su declaración? 36 Este
es el sueño: la declaración de él diremos también en presencia del rey.
Aquí el
único intérprete del sueño es Daniel, sin embargo, dice de él mismo “diremos”.
Esdras 4:7 Y en días de Artajerjes, Bislam, Mitrídates, Tabeel, y los demás
sus compañeros, escribieron a Artajerjes rey de Persia; y la escritura de la
carta estaba hecha en siriaco, y declarada en siriaco…17 El rey
envió esta respuesta a Rehum canciller, y a Simsai secretario, y a los demás
sus compañeros que habitan en Samaria, y a los demás de la parte allá del río:
Paz, etc. 18 La carta que nos enviasteis claramente fue leída
delante de mí.
Aquí se nos
dice que el único destinatario de la carta era el rey, no la entera corte. El
rey responde diciendo: la carta que “nos” enviasteis, un claro uso de plural de
excelencia.
Conclusión:
La palabra «אֱלהִים Eloqim» en referencia a Di-s es siempre, en
todos los casos, singular y no indica en ninguna manera que pueda implicar o
sugerir una pluralidad. El uso plural del verbo en las poquísimas veces en que
lo encontramos (hemos citado todos los casos existentes en el TaNaJ) está en
modo cohortativo o de plural de excelencia. Igualmente el pronombre, la única
vez que está en primera persona del plural, es plural de excelencia. Así lo
determinan todos los eruditos de la lengua hebrea, judíos y no judíos. Quien
tenga dudas, puede consultar las obras de Rabí Saadia Gaon, Kimji David,
Abraham ibn Ezra, Judá ben David Jaiuj (judíos) y de John Reuchlin, Wilhelm
Gesenius, Pablo Joon, Rudolf Meyer y otros eruditos gentiles.
En la segunda parte veremos la palabra «Ejád».
EJÁD אֶחָד
Como ya
vimos en la primera parte, el argumento de los trinitarios acerca de la palabra
«אֱלהִים Eloqim» no tiene fundamento
alguno, ni escritural ni lingüístico, y es simplemente erróneo (por desconocimiento
quizás, o por mala intención en muchos casos), pero en cuanto a «אֶחָד
Ejád» lo que ellos argumentan es lisa y llanamente una
falacia.
El embuste (porque eso es y no otra cosa) que proponen es una presunta
diferencia entre «אֶחָד Ejád» y «יָחִיד Yajíd». Una distinción entre ambos términos hay, pero no es la que ellos
dicen. En castellano también hay una diferencia entre “uno” y “único”, y es
exactamente la misma que existe en hebreo entre «אֶחָד Ejád» y «יָחִיד Yajíd». Entendiendo la diferencia en castellano, podemos entender fácilmente
la que hay en hebreo, porque es exactamente la misma.
En castellano “uno” significa “uno” (no tres, ni ningún otro número), una
unidad, que puede o no estar compuesta de más elementos: por ejemplo “un
hombre” es una unidad simple, “un pueblo” es una unidad colectiva. Y
exactamente lo mismo sucede con “único” –algo que es sólo uno o que es uno solo
en su clase o especie–, también puede referirse a una unidad compuesta, por
ejemplo: “su única riqueza son sus hijos”; aquí vemos que algo “único” puede
ser compuesto por varias personas. Por lo tanto, en cuanto a singularidad o
pluralidad, tanto “uno” como “único” admiten ambas posibilidades. Y lo mismo se
entiende para «אֶחָד Ejád» y «יָחִיד Yajíd»
Veamos
primero las únicas veces que encontramos la palabra « יָחִיד Yajíd » en el
TaNaJ:
Génesis 22:2 Y dijo: Toma ahora tu hijo, tu único יָחִיד Yajíd, Isaac, a
quien amas, y vete a tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno
de los montes que yo te diré…22:12 Y dijo: No extiendas tu mano
sobre el muchacho, ni le hagas nada; que ya conozco que temes a Eloqim, pues
que no me rehusaste tu hijo, tu único יָחִיד Yajíd; 22:16 Y dijo: Por mí mismo he jurado,
dice HaShem, que por cuanto has hecho esto, y no me has rehusado tu hijo, tu
único יָחִיד Yajíd.
Mishlei - Proverbios
4:3 Porque yo fuí hijo de mi padre, Delicado y
único [יָחִיד Yajíd] delante de mi madre.
Jeremías
6:26 Hija de mi pueblo, cíñete de saco, y
revuélcate en ceniza; hazte luto como por hijo único [יָחִיד Yajíd], llanto de
amarguras: porque presto vendrá sobre nosotros el destruidor.
Amós 8:10 Y tornaré vuestras fiestas en lloro, y todos vuestros
cantares en endechas; y haré poner saco sobre todos lomos, y peladura sobre
toda cabeza; y la tornaré como en llanto de unigénito [יָחִיד Yajíd], y su
postrimería como día amargo.
Bien, en el
caso de Isaac sabemos perfectamente que no era el único hijo de Avraham, sino
que había otros siete, por lo tanto aquí el uso de « יָחִיד Yajíd », ¿significa que se trata de una sola persona?
¡No! Más bien significa que se trata de una persona especial, un hijo distinto
de los demás. Por lo tanto, este pasaje no sirve como ejemplo para demostrar lo
que los trinitarios pretenden demostrar.
El mismo sentido de “especial” es el que vemos en Mishlei - Proverbios 4:3. No
indica “unidad indivisible” (que es lo que « יָחִיד Yajíd » NO significa en ningún caso) sino que muestra
una categoría especial, una predilección, un privilegio.
En este sentido, si los trinitarios, triunitarios y unicistas dicen que Eloqim
no es « יָחִיד Yajíd » blasfeman, porque están diciendo que no es el único Di-s para ellos,
sino que también hay otros. En otras palabras, negar que Eloqim es «יָחִיד Yajíd» es
politeísmo. También el pueblo de Israel (unidad compuesta por muchas personas)
es « יָחִיד Yajíd » para Di-s, porque es su especial tesoro.
En los otros
dos pasajes que hemos citado, « יָחִיד Yajíd » significa hijo único, o sea, que no hay más hijos. Ninguna evidencia
que pueda significar “uno simple” como afirman los aprendices de teólogos
cristianos.
Ahora pasemos a la palabra « אֶחָד Ejád », que está
escrita más de 300 veces en el TaNaJ. Por la abundancia de textos en los que
esta palabra aparece, sólo citaremos algunos, los suficientes para demostrar
que «אֶחָד Ejád» significa “uno” y que no implica pluralidad
alguna.
Ejemplos en el
Libro del Génesis:
Génesis 1:9 Y dijo Eloqim: Júntense las aguas que están debajo de los cielos
en un [אֶחָד Ejád] lugar, y descúbrase la seca: y fue así.
UN lugar:
unidad simple.
Génesis 11:6 Y dijo HaShem: He aquí el pueblo es uno [אֶחָד Ejád], y todos éstos tienen un lenguaje: y han comenzado a obrar, y nada les
retraerá ahora de lo que han pensado hacer.
UN pueblo:
unidad compuesta.
Génesis
21:15 Y faltó el agua del odre, y echó al muchacho
debajo de un [אֶחָד Ejád] árbol…
UN árbol:
unidad simple.
Génesis 22:2 Y dijo: Toma ahora tu hijo, tu único, Isaac, a quien amas, y vete
a tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno [אֶחָד Ejád] de los montes que yo te diré.
UN monte:
unidad simple.
Génesis 40:5 Y ambos a dos, el copero y el panadero del rey de Egipto, que
estaban arrestados en la prisión, vieron un sueño, cada uno su sueño en una
misma [אֶחָד Ejád] noche, cada uno conforme a la declaración de su
sueño.
41:11 Y yo y él vimos un sueño una misma [אֶחָד Ejád] noche: cada uno soñó conforme a la declaración de su sueño.
UNA noche:
unidad simple.
Génesis 41:5 Durmióse de nuevo, y soñó la segunda vez: Que siete espigas llenas
y hermosas subían de una sola [אֶחָד Ejád] caña:
41:22 Vi también soñando, que siete espigas subían en una misma [אֶחָד Ejád] caña llenas y hermosas…
UNA SOLA
caña: unidad simple.
Génesis
41:25 Entonces respondió José a Faraón: El sueño de
Faraón es uno mismo [אֶחָד Ejád]: Eloqim ha
mostrado a Faraón lo que va a hacer.
41:26 Las siete vacas hermosas siete años son; y las espigas
hermosas son siete años: el sueño es uno mismo [אֶחָד Ejád].
UN sueño:
unidad compuesta por dos cosas ABSTRACTAS que significan una sola cosa.
Génesis
42:16 Enviad uno [אֶחָד Ejád] de vosotros, y traiga a vuestro hermano; y vosotros quedad presos, y
vuestras palabras serán probadas, si hay verdad con vosotros: y si no, vive
Faraón, que sois espías. 42:19 Si sois hombres de verdad, quede
preso en la casa de vuestra cárcel uno [אֶחָד Ejád] de vuestros hermanos; y vosotros id, llevad el alimento para el hambre
de vuestra casa:
UN hombre:
unidad simple (¿o serían estos hombres “trinidades, triunidades o
manifestaciones”?)
Ejemplos en
el Libro del Éxodo:
Éxodo 10:19 Y HaShem volvió un viento occidental fortísimo, y quitó la
langosta, y arrojóla en el mar Bermejo: ni una [אֶחָד Ejád] langosta quedó en todo el término de Egipto.
UNA
langosta: unidad simple (¿o acaso la langosta es un ser trino?)
Éxodo 12:46 En una [אֶחָד Ejád] casa se
comerá, y no llevarás de aquella carne fuera de casa, ni quebraréis hueso suyo.
UNA casa:
unidad simple, porque en este caso se habla de la casa en sentido de vivienda,
no de familia.
Éxodo 17:12 Y las manos de Moisés estaban pesadas; por lo que tomaron una
piedra, y pusiéronla debajo de él, y se sentó sobre ella; y Aarón y Hur sustentaban
sus manos, el uno [אֶחָד Ejád] de una
parte y el otro [אֶחָד Ejád] de otra; así hubo en sus manos firmeza hasta que
se puso el sol.
UNO era
Aharón, y el OTRO (en hebreo dice también “UNO”) era Hur… ¿eran estos dos
hombres trinos, triunos o manifextaciones?
Éxodo 25:19 Harás, pues, un [אֶחָד Ejád] querubín al extremo de un lado, y un [אֶחָד Ejád] querubín al otro extremo del lado opuesto: de la calidad de la
cubierta harás los querubines en sus dos extremidades.
UN querubín:
unidad simple (¿o también los querubines son “trinidades, triunidades o
manifestaciones”?)
Éxodo 29:1 Y esto es lo que les harás para consagrarlos, para que sean mis
sacerdotes: Toma un [ejád] becerro de la vacada, y dos carneros sin tacha;
UN becerro:
unidad simple (¿o también los animales son “trinos”?)
Éxodo 33:5 Pues HaShem dijo a Moisés: Di a los hijos de Israel: Vosotros sois
pueblo de dura cerviz: en un [אֶחָד Ejád] momento subiré en medio de ti, y te consumiré: quítate pues ahora tus
atavíos, que yo sabré lo que te tengo de hacer.
UN momento:
unidad simple y absolutamente INDIVISIBLE!!! Un momento es la mínima unidad de
tiempo que existe. No puede haber un momento en etapas, ni compuesto en ninguna
manera. Y aquí vemos que un momento es «ejád».
Éxodo 37:19 En el un [אֶחָד Ejád] brazo,
tres copas figura de almendras, una manzana y una flor; y en el otro [ejád]
brazo tres copas figura de almendras, una manzana y una flor: y así en los seis
brazos que salían del candelero.
UN brazo:
unidad simple.
Ejemplos en
el Libro de Levítico:
Levítico 5:7 Y si no le alcanzare para un cordero, traerá en expiación por su
pecado que cometió, dos tórtolas ó dos palominos a HaShem; el uno [אֶחָד Ejád] para expiación, y el otro [אֶחָד Ejád] para holocausto.
12:8 Y si no alcanzare su mano lo suficiente para un cordero, tomará
entonces dos tórtolas ó dos palominos, uno [אֶחָד Ejád] para holocausto, y otro [אֶחָד Ejád] para expiación: y el sacerdote hará expiación por ella, y será limpia.
UNA tórtola
o paloma y OTRA (en hebreo “UNA”) tórtola o paloma, animales que difícilmente
puedan ser considerados trinos, triunos
o manifestaciones.
Levítico
7:14 Y de toda la ofrenda presentará una parte [אֶחָד Ejád] por ofrenda elevada a HaShem, y será del sacerdote que rociare la
sangre de los pacíficos.
UNA parte, o
sea, algo que ya ha sido dividido, cada una de sus partes es «ejád». Unidad
simple.
Levítico
8:26 Y del canastillo de los ázimos, que estaba
delante de HASHEM, tomó una [אֶחָד Ejád] torta sin levadura, y una [ejád] torta de pan de aceite, y una [אֶחָד Ejád] lasaña, y púsolo con el sebo y con la espaldilla derecha.
UNA torta,
UNA lasaña… unidades que efectivamente son divisibles, pero no en otras
unidades definidas sino sólo en pedazos, que de por sí solos no forman un todo.
Levítico
14:10 Y el día octavo tomará dos corderos sin
defecto, y una [אֶחָד Ejád] cordera de un año sin tacha; y tres décimas de
flor de harina para presente amasada con aceite, y un [אֶחָד Ejád] log de aceite.
14:21 Mas si fuere pobre, que no alcanzare su mano a tanto,
entonces tomará un [אֶחָד Ejád] cordero
para ser ofrecido como ofrenda agitada por la culpa, para reconciliarse, y una
décima de flor de harina amasada con aceite para presente, y un [אֶחָד Ejád] log de aceite;
14:22 Y dos tórtolas, ó dos palominos, lo que alcanzare su mano: y
el uno [אֶחָד Ejád] será para expiación por el pecado, y el otro [אֶחָד Ejád] para holocausto…
UNA cordera,
UN cordero, UNA tórtola o paloma… todos son animales, por lo tanto unidades y
no trinidades, triunidades o manifestaciones. UN log, es una medida
indivisible.
Levítico
16:5 Y de la congregación de los hijos de Israel
tomará dos machos de cabrío para expiación, y un [אֶחָד Ejád] carnero para holocausto.
16:8 Y echará suertes Aarón sobre los dos machos de cabrío; la una
[אֶחָד Ejád] suerte por HaShem, y la otra [אֶחָד Ejád] suerte por Azazel.
UN carnero,
UN macho cabrío, OTRO macho cabrío… todos son animales, por lo tanto unidades y
no trinidades, triunidades o mnifestaciones.
Levítico
23:18 Y ofreceréis con el pan siete corderos de un
año sin defecto, y un [אֶחָד Ejád] becerro de
la vacada y dos carneros: serán holocausto a HaShem, con su presente y sus
libaciones; ofrenda encendida de suave olor a HaShem. 23:19 Ofreceréis
además un [אֶחָד Ejád] macho de cabrío por expiación; y dos corderos de
un año en sacrificio de paces.
UN becerro,
UN macho cabrío… más animales, todos ellos unidades y no trinidades, triunidades
o manifestaciones.
Levítico
24:22 Un mismo [אֶחָד Ejád] derecho tendréis: como el extranjero, así será el
natural: porque yo soy HaShem vuestro Eloqim.
UN derecho
es una unidad abstracta no cuantificable ni divisible.
Levítico
25:48 Después que se hubiere vendido, podrá ser
rescatado: uno [אֶחָד Ejád] de sus
hermanos lo rescatará;
UN hermano,
es un hombre, un ser humano. UNA PERSONA, no tres.
Ejemplos en
el Libro de Números:
En este Libro encontramos la palabra «ejád» decenas de veces en referencia a
animales, seres que los trinitarios no consideran como trinos o plurales, y sin
embargo ninguno de ellos es llamado «yajíd» como ellos afirman que se debería
designar a seres no compuestos.
Números 7:11 Y HASHEM dijo a Moisés: Ofrecerán su ofrenda, un [אֶחָד Ejád] príncipe un día, y otro [אֶחָד Ejád] príncipe otro día, a la dedicación del altar.
UN príncipe,
es un hombre, un ser humano. UNA PERSONA.
Números
7:15-16 Un [אֶחָד Ejád] becerro, un [אֶחָד Ejád] carnero, un [אֶחָד Ejád] cordero de un año para holocausto; Un [ejád]
macho cabrío para expiación… (cf. Números
7:21-22;27-28;33-34;39-40;45-46;51-52;57-58;63-64;69-70;75-76;81-82).
UN becerro,
UN carnero, UN cordero, UN macho cabrío. Animales, seres unitarios y no trinos.
En estos pasajes se usa « אֶחָד Ejád » 24 veces en referencia a animales. ¿Alguien
sigue convencido de que « אֶחָד Ejád » implica pluralidad y no unidad? Aun así,
presentaremos más ejemplos.
Números
11:19 No comeréis un [אֶחָד Ejád] día, ni dos días, ni cinco días, ni diez días, ni
veinte días.
En este
caso, « אֶחָד Ejád » se
manifiesta como unidad absoluta, en oposición a dos, tres o cualquier otro
número.
Números 13:2
(13:3) Envía tú hombres que reconozcan la tierra de
Canaán, la cual yo doy a los hijos de Israel: de cada tribu de sus padres
enviaréis un varón [אֶחָד Ejád], cada uno [אֶחָד Ejád] príncipe entre ellos.
UN varón, UN
príncipe. Personas, hombres, seres unitarios, no trinos.
Números
15:16 Una misma [אֶחָד Ejád] ley y un mismo [אֶחָד Ejád] derecho tendréis, vosotros y el peregrino que con
vosotros mora.
UNA ley, UN
derecho, es una unidad abstracta no cuantificable ni divisible.
Números 17:3 Y escribirás el nombre de Aarón sobre la vara de Leví; porque cada
cabeza de familia de sus padres tendrá una [אֶחָד Ejád] vara.
UNA vara,
una unidad indivisible.
Números 29:2 Y ofreceréis holocausto por olor de suavidad a HASHEM, un [אֶחָד Ejád] becerro de la vacada, un [אֶחָד Ejád] carnero, siete corderos de un año sin defecto; 29:4 Y
con cada uno [אֶחָד Ejád] de los siete
corderos, una [אֶחָד Ejád] décima; 29:5 Y
un [אֶחָד Ejád] macho
cabrío por expiación, para reconciliaros: 29:8 Y ofreceréis en
holocausto a HASHEM por olor de suavidad, un becerro [אֶחָד Ejád] de la vacada, un carnero [אֶחָד Ejád], siete corderos de un año; sin defecto los
tomaréis: 29:11 Un [אֶחָד Ejád] macho cabrío por expiación: además de la ofrenda
de las expiaciones por el pecado, y del holocausto continuo, y de sus presentes,
y de sus libaciones. (cf. Números 29:16,19,22,25,28,31,34). Números 29:36 Y
ofreceréis en holocausto, en ofrenda encendida de olor suave a HASHEM, un [אֶחָד Ejád] novillo, un [אֶחָד Ejád] carnero, siete corderos de un año sin defecto;
29:38 Y un [אֶחָד Ejád] macho cabrío por expiación: además del holocausto
continuo, con su presente y su libación.
UN becerro,
UN carnero, UN macho cabrío, UN novillo… todos los animales, sin excepción
alguna, son cuantificados con la palabra «אֶחָד Ejád» para determinar “uno”. No se usa ningún otro
término. Definitivamente, «אֶחָד Ejád» indica unidad.
Números
35:30 Cualquiera que hiriere a alguno, por dicho de
testigos, morirá el homicida: mas un solo [אֶחָד Ejád] testigo no hará fé contra alguna persona para que
muera.
UN SOLO
testigo, se trata de una persona, no de tres ni de algún otro número, no es una
pluralidad, es un hombre, o una mujer, pero es UNO.
Podríamos prolongar este estudio aún más. Tenemos todo el resto de la Biblia para
seguir demostrando que «אֶחָד Ejád» no sugiere en ninguna manera que se trate de una
pluralidad, sino todo lo contrario, es la definición más absoluta de unidad.
Honestamente, creemos que los pasajes citados puedan ser suficientes. Las
evidencias están a la vista, con cientos de pasajes tanajicos (no alguno tomado
aisladamente y fuera del contexto para querer demostrar una falacia), que
la “Shemá” declara indiscutiblemente que HASHEM Eloqim es UNO.
Si alguien quiere ser trinitario, triunitario o unicista está en todo su
derecho, lo que no puede hacer es justificarlo con las Escrituras.
Por ello, se explica la Mishnah en Masejet
Berajot 2:2 bajo la enseñanza de R’ Yehoshúa ben Qorja (ר' יהושע בן קרחה) que al recitar el Keriat
Shema’ (Escucha oh Israel) que al recitar esta oración cada cual
acepte el yugo de los cielos (de la unicidad de Di”s-שמוע אלא כדי שיקבל עליו עול מלכות שמים) primeramente y luego acepte el
yugo de los mandamientos (ואחר כך יקבל עליו עול מצות). Incluso Yehoshúa Ben Yosef
(Yehoshúa de Nazaret), en el Escrito de Tejilat haBesora (mal llamado Marcos)
12:29-31 (נא ישׁו ואמר קדמי מן כולהון שׁמע איסריל מריא אלהן חד הו / ὁ δὲ Ἰησοῦς ἀπεκρίθη αὐτῷ ὅτι πρώτη πάντῶν ἐντολή• ἄκουε, Ἰσραήλ, Κύριος ὁ Θεὸς ἡμῶν Κύριος εἷς ἐστι) en tal Escrito se lee que él
consideró al Shemá como el primero de los dos mayores mandamientos y lo
ligó con un segundo, basado en Vayiqrá / Levítico 19:18, esto sin que él
se auto afiliara como parte de la divinidad o bajo una extraña creencia
idolatra, hasta ese momento!
El Keriat Shema’ tal como aparece en la
Torah no da oportunidad a incorporar siquiera la creencia errónea de otra
deidad, tal como se encuentra en la Perashat Vaejtanán, Sefer Devarim 6:4 se
lee:
שְׁמַע יִשְׂרָאֵל יהוה אֱלֹהֵינוּ יהוה אֶחָד
Escucha, oh Israel, el Eterno [que] es nuestro
Di-s, el Eterno es Uno.
Aunque hemos traducido la palabra “אֶחָד” por “Uno” en aras de la
concisión de estilo, se debe de tener en mente que en hebreo אֶחָד tiene un doble significado: Uno
en el sentido de que en en sí mismo no es plural, y Único en el
sentido de que no hay otro Di-s, por ello en la traducción judeo-árabe del Rab
Sa’adia Gaón Al-Fayyumi en tu Tafsir
(traducción de la
Torah del hebreo al árabe), la cual fuera utilizada desde el siglo 10 hasta el
siglo 15 tanto en las comunidades judías de Bagdag, el Magreb y en Al-Andaluz;
en tal traducción aparece de la siguiente forma tal pasuk:
אעלם יא יסראיל אן אללה רבנא אללה אלואחיד
﴿اِعْلَمْ يَا إِسْرَائِيلَ إِنَّ اللهَ رَبُّنَا اللهُ ٱلوَاحِدُ﴾
(Conozca, oh Israel, Di-s, es nuestro Señor,
Di-s es Único / Ilam ya’ Israil 'an Allah rabna Allah al-wajid)
Rab Sa’adia Gaon Al-Fayyumi hizo grandes esfuerzos
para eliminar todas las sugerencias Tanajicas de que Di-s podría tener un
cuerpo o una voz, al preocuparse de que la mención de una mano divina, el
brazo, el corazón o el habla podría llevar a la gente sin educación a creer que
Di-s tenía una presencia física. Esto no era sólo una cuestión de educación, la
agresividad de Sa’adia se manifestó en todos los aspectos de su vida, incluso
su traducción de la Torah. El teólogo musulmán al-Jahiz, había atacado
la Escritura Hebrea por su representación de Di-s como un ser físico. Había
tomado especial excepción a la referencia en Devarim / Deuteronomio 4,24 en el que la deidad se describe como un "fuego
consumidor-אֵ֥שׁ אֹכְלָ֖ה". Rab Sa’adia Gaon no tuvo
reparos en el cumplimiento de tales críticas de frente. El fuego que consume,
de acuerdo con Saadia, es una metáfora de castigo celestial, tal como se lee en
su Tafsir:
לאן עקאב אללה רבך נאר אכלה הו
אלטאיק אלמעאקב - لان عقاب الله ربك
نار اكله هو الطايق المعاقب
(-Le’an iqab Allah Rabak -Porque el
castigo de Allah (Di-s) vuestro Señor, es fuego
que consume -na’ar akalah-, Él desea castigar -Hu’
al-taik al-muakib)
Esta versión es gramaticalmente correcta en el
árabe ya que se ajustaba tanto a la tradición judía y el pensamiento filosófico
de la época medieval.